Kreuzweg
Estaciónes de la Cruz


 

 

1. Station:
Jesus wird zum Tode verurteilt.

1 Estación :
Jesús es condenado a muerte.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Gott ist unerforschlich in Seinen Ratschlüssen und unbegreiflich in Seinen Wegen: Pilatus darf über das Leben des Gottmenschen urteilen. Aus Menschenfurcht spricht er ein ungerechtes Urteil; Jesus hört darin die Stimme Seines himmlischen Vaters und schweigt. Es fällt uns schwer, erlittenes Unrecht schweigend hinzunehmen. Einmal kommt der Tag, das Gericht; da wird Jesus nicht mehr schweigen, sondern reden. Wir werden dann horchen und gehorchen müssen.

- Herr lehre mich im Leben stiller werden und geduldig, auch wenn mich ein Unrecht schwer trifft.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gib mir etwas von Deiner Gesinnung!
Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

«Reo es de muerte», dijeron de Jesús los miembros del Sanedrín, y, como no podían ejecutar a nadie, lo llevaron de la casa de Caifás al Pretorio. Pilato no encontraba razones para condenar a Jesús, e incluso trató de liberarlo, pero, ante la presión amenazante del pueblo instigado por sus jefes: «¡Crucifícalo, crucifícalo!», «Si sueltas a ése, no eres amigo del César», pronunció la sentencia que le reclamaban y les entregó a Jesús, después de azotarlo, para que fuera crucificado.

San Juan el evangelista nos dice que, pocas horas después, junto a la cruz de Jesús estaba María su madre. Y hemos de suponer que también estuvo muy cerca de su Hijo a lo largo de todo el Vía crucis. Cuántos temas para la reflexión nos ofrecen los padecimientos soportados por Jesús desde el Huerto de los Olivos hasta su condena a muerte: abandono de los suyos, negación de Pedro, flagelación, corona de espinas, vejaciones y desprecios sin medida. Y todo por amor a nosotros, por nuestra conversión y salvación.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

2. Station:
Jesus nimmt das Kreuz auf Seine Schultern.

2 Estación :
Jesús carga con la cruz.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Isaias sagt von Jesus, dem Messias, voraus: "Ein Sohn ist uns geschenkt, auf seinen Schultern ruht die Weltherrschaft." Nun ruht das durch unsere Sünden gezimmerte Kreuz auf diesen blutenden Schultern.
Weil die Sünde die Herrschaft an sich gerissen, muß der Herr das Kreuz tragen. Er trägt die Last der anderen und ruft uns zur Nachfolge auf: Nehmt Mein Joch auf euch, meine Bürde ist leicht, wer Mein Jünger sein will, nehme jeden Tag sein Kreuz auf sich und folge Mir nach. Wie bitter schmerzt es uns, wenn wir die Schuld anderer auf uns nehmen sollen. Aber so wird die Welt erlöst, so werden die Seelen gerettet: durch anderer Leiden und Opfer.

- Herr, gib mir die Kraft, die Leiden, die Du mir schickst, entschlossen zu tragen und auch der Mitmenschen Last tragen zu helfen!

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Condenado muerte, Jesús quedó en manos de los soldados del procurador, que lo llevaron consigo al pretorio y, reunida la tropa, hicieron mofa de él. Llegada la hora, le quitaron el manto de púrpura con que lo habían vestido para la burla, le pusieron de nuevo sus ropas, le cargaron la cruz en que había de morir y salieron camino del Calvario para allí crucificarlo.

El peso de la cruz es excesivo para las mermadas fuerzas de Jesús, convertido en espectáculo de la chusma y de sus enemigos. No obstante, se abraza a su patíbulo deseoso de cumplir hasta el final la voluntad del Padre: que cargando sobre sí el pecado, las debilidades y flaquezas de todos, los redima. Nosotros, a la vez que contemplamos a Cristo cargado con la cruz, oigamos su voz que nos dice: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame».

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

3. Station:
Jesus fällt zum erstenmal unter dem Kreuz.

3 Estación :
Jesús cae por primera vez.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Welche Unbegreiflichkeit: Die Allmacht des Gottmenschen ist zur Ohnmacht des Menschensohnes geworden. Wie schwer lastet unsere, meine Sünde auf Ihm. Unsere verdiente Züchtigung liegt auf Ihm.
Gott hat Ihn mit meinen Sünden geschlagen. Der Herr nimmt mich sehr ernst. Dieser erste Fall Jesu unter dem Kreuze zeigt mir anschaulich, was die Sünde ist: sie stößt Gott von sich. Die Sünde
ist mehr als menschlich-verzeihliche Schwäche, sie ist eine Tat des Menschen mit erhobener Faust gegen Gott.

- Herr, Du blutest auf der Erde für mich und ich nehme es mir nicht zu Herzen.
Nimm mich lieber aus dieser Welt, als daß ich je einmal schwer sündige.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Nuestro Salvador, agotadas las fuerzas por la sangre perdida en la flagelación, debilitado por la acerbidad de los sufrimientos físicos y morales que le infligieron aquella noche, en ayunas y sin haber dormido, apenas pudo dar algunos pasos y pronto cayó bajo el peso de la cruz. Se sucedieron los golpes e imprecaciones de los soldados, las risas y expectación del público. Jesús, con toda la fuerza de su voluntad y a empellones, logró levantarse para seguir su camino.

Isaías había profetizado de Jesús: «Eran nuestras dolencias las que él llevaba y nuestros dolores los que soportaba. Yahvé descargó sobre él la culpa de todos nosotros». El peso de la cruz nos hace tomar conciencia del peso de nuestros pecados, infidelidades, ingratitudes..., de cuanto está figurado en ese madero. Por otra parte, Jesús, que nos invita a cargar con nuestra cruz y seguirle, nos enseña aquí que también nosotros podemos caer, y que hemos de comprender a los que caen; ninguno debe quedar postrado; todos hemos de levantarnos con humildad y confianza buscando su ayuda y perdón.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

4. Station:
Jesus begegnet Seiner Mutter.

4 Estación :
Jesús se encuentra con su Madre.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Die Mutter! Zwei heilige Seelen begegnen sich im größten Leid: Jesus, der von der Sünde nichts wußte und die Mutter, die voll der Gnade ist. Das Geheimnis des unverschuldeten Leidens! Mutter
und Sohn sind aber im Leiden nicht irre geworden am Vater im Himmel. Sie fragen nicht nach dem Warum. Vor Gott muß unser Murren verstummen und der Hader muß schweigend in gefaltete änden gelegt werden.
Gott ist die Liebe, ob er wohl- oder wehtut. Nun wissen wir, daß der Herr und Seine Mutter uns in jedem Leid verstehen, weil sie alles durchgemacht haben.

- Herr, Du hast in Deiner Begegnung
mit der Mutter Trost gefunden. Ich darf mich an sie, als Trösterin der Betrübten, wenden. Lehre mich, liebevoll Rücksicht zu nehmen auf die Leiden der Menschen.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

En su camino hacia el Calvario, Jesús va envuelto por una multitud de soldados, jefes judíos, pueblo, gentes de buenos sentimientos... También se encuentra allí María, que no aparta la vista de su Hijo, quien, a su vez, la ha entrevisto en la muchedumbre. Pero llega un momento en que sus miradas se encuentran, la de la Madre que ve al Hijo destrozado, la de Jesús que ve a María triste y afligida, y en cada uno de ellos el dolor se hace mayor al contemplar el dolor del otro, a la vez que ambos se sienten consolados y confortados por el amor y la compasión que se transmiten.

Nos es fácil adivinar lo que padecerían Jesús y María pensando en lo que toda buena madre y todo buen hijo sufrirían en semejantes circunstancias. Esta es sin duda una de las escenas más patéticas del Vía crucis, porque aquí se añaden, al cúmulo de motivos de dolor ya presentes, la aflicción de los afectos compartidos de una madre y un hijo. María acompaña a Jesús en su sacrificio y va asumiendo su misión de corredentora.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

5. Station:
Simon von Cyrene hilft Jesus das Kreuz tragen.

5 Estación :
Jesús es ayudado por el Cireneo.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Als der Herr Wunder über Wunder wirkte an Kranken und Toten, als Er Brot vermehrte und Kinder segnete, drängte sich alles Volk an Ihn heran. Jetzt im Leiden, ist es still um Ihn geworden.
Er ist verlassen vom Vater im Himmel, von Seinen Freunden und von Seinem Volke. "Nur Schmähung und Leid hat Mein Herz zu erwarten, da schau Ich aus, ob jemand Mitleid habe, niemand ist da; einen Tröster such' Ich, keinen find' Ich." Jesus will auf Simon von Cyrene angewiesen sein. Die Allmacht läßt sich helfen. Es ist die größte Ehre, die Gott uns Menschen erweisen konnte, daß Er uns zur Mitarbeit beruft. In jedem leidenden Menschen schaut uns das Bild des kreuztragenden Herrn an. Wieviel Gelegenheit habe ich, meine Liebe zu Gott im Dienst am Nächsten zu beweisen. Es ist leichter, zu geben, als zu empfangen.

- Herr öffne mir den Blick für das Leid meiner Mitmenschen. Lasse mich nicht herzlos, vorübergehen am Schicksal der Armen.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Jesús salió del pretorio llevando a cuestas su cruz, camino del Calvario; pero su primera caída puso de manifiesto el agotamiento del reo. Temerosos los soldados de que la víctima sucumbiese antes de hora, pensaron en buscarle un sustituto. Entonces el centurión obligó a un tal Simón de Cirene, que venía del campo y pasaba por allí, a que tomara la cruz sobre sus hombros y la llevara detrás de Jesús. Tal vez Simón tomó la cruz de mala gana y a la fuerza, pero luego, movido por el ejemplo de Cristo y tocado por la gracia, la abrazó con resignación y amor y fue para él y sus hijos el origen de su conversión.

El Cireneo ha venido a ser como la imagen viviente de los discípulos de Jesús, que toman su cruz y le siguen. Además, el ejemplo de Simón nos invita a llevar los unos las cargas de los otros, como enseña San Pablo. En los que más sufren hemos de ver a Cristo cargado con la cruz que requiere nuestra ayuda amorosa y desinteresada.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

6. Station:
Veronika reicht Jesus das Schweißtuch.

6 Estación:
Verónica limpia el rostro de Jesús.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Aus der Reihe der teilnahmslosen Menschen tritt Veronika mit einem Schweißtuch vor den Herrn. Dafür erhält sie das Bild des Meisters zurück. Es ist aber ein Bild des blutigen Leidens.
So ist der Herr. Wenn wir Ihm etwas schenken, lohnt Er es vielmals zurück; Gott dankt den Menschen. Gott will auch durch mich den Menschen danken. Gott übersieht und überhört und übergeht keinen Dienst helfender Liebe.

- Herr, Du hast uns berufen, Deinem Bilde ähnlich zu werden. Präge Dein Bild tief in mich ein und zeige mir, wie schön und wichtig es ist, zu danken.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Dice el profeta Isaías: «No tenía apariencia ni presencia; lo vimos y no tenía aspecto que pudiésemos estimar. Despreciable y desecho de hombres, varón de dolores y sabedor de dolencias, como uno ante quien se oculta el rostro, despreciable, y no lo tuvimos en cuenta». Es la descripción profética de la figura de Jesús camino del Calvario, con el rostro desfigurado por el sufrimiento, la sangre, los salivazos, el polvo, el sudor... Entonces, una mujer del pueblo, Verónica de nombre, se abrió paso entre la muchedumbre llevando un lienzo con el que limpió piadosamente el rostro de Jesús. El Señor, como respuesta de gratitud, le dejó grabada en él su Santa Faz.

Una letrilla tradicional de esta sexta estación nos dice: «Imita la compasión / de Verónica y su manto / si de Cristo el rostro santo / quieres en tu corazón». Nosotros podemos repetir hoy el gesto de la Verónica en el rostro de Cristo que se nos hace presente en tantos hermanos nuestros que comparten de diversas maneras la pasión del Señor, quien nos recuerda: «Lo que hagáis con uno de estos, mis pequeños, conmigo lo hacéis».

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

7. Station:
Jesus fällt zum zweitenmal unter dem Kreuz.

7 Estación:
Jesús cae por segunda vez.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Mensch sein heißt: schwach sein. Ich bereue meine Sünden und falle wieder in dieselben zurück. Was der Mensch heute anbetet, kann er morgen schon wieder verleugnen. Wegen meiner vielen rückfälligen
Sünden fällt der Herr zum zweitenmal. Der immer sich wiederholende Kampf und die Plage macht mich schnell müde und verzagt. Das wußte der Herr; so wollte Er auch dies durchmachen. Er hebt mich
immer wieder auf. Was bliebe meiner Seele noch, wenn ich Ihn nicht mehr hätte!

- Herr, bewahre mich vor mir selber, denn wenn Du mir die Gnade nicht gibst, bin ich zu allem fähig.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Jesús había tomado de nuevo la cruz y con ella a cuestas llegó a la cima de la empinada calle que daba a una de las puertas de la ciudad. Allí, extenuado, sin fuerzas, cayó por segunda vez bajo el peso de la cruz. Faltaba poco para llegar al sitio en que tenía que ser crucificado, y Jesús, empeñado en llevar a cabo hasta la meta los planes de Dios, aún logró reunir fuerzas, levantarse y proseguir su camino.

Nada tiene de extraño que Jesús cayera si se tiene en cuenta cómo había sido castigado desde la noche anterior, y cómo se encontraba en aquel momento. Pero, al mismo tiempo, este paso nos muestra lo frágil que es la condición humana, aun cuando la aliente el mejor espíritu, y que no han de desmoralizarnos las flaquezas ni las caídas cuando seguimos a Cristo cargados con nuestra cruz. Jesús, por los suelos una vez más, no se siente derrotado ni abandona su cometido. Para Él no es tan grave el caer como el no levantarnos. Y pensemos cuántas son las personas que se sienten derrotadas y sin ánimos para reemprender el seguimiento de Cristo, y que la ayuda de una mano amiga podría sacarlas de su postración.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

8. Station:
Jesus und die weinenden Frauen von Jerusalem.

8 Estación:
Jesús consuela la a las mujeres
de Jerusalén.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Bis jetzt hat der Herr nichts gesagt auf dem Kreuzweg: weder eine Klage noch eine Frage. Er redet nicht von Sich, von Seinen Leiden. Seine Gedanken sind vielmehr bei uns. Beim Anblick der
weinenden Frauen löst Er das Schweigen: "Weinet nicht über Mich, weinet über euch, über eure Kinder." Jesus will nicht Mitleid, fromme Gefühle, schöne Worte. Es kommt auf die Tat an.
Wir wollen über die Leiden des Volkes, um die Sünder und Sünde weinen. Die Sünde ist schuld an Seinem Leiden. Vor Jerusalem weint der Herr wegen der verschmähten Liebe und der verlorenen Gnaden.

- Herr, muß es Dich reuen, mich erschaffen, erlöst zu haben und für mich das Blut vergossen zu haben? Was denkst Du von mir? Bringe aus der Härte meines Herzens die Tränen der Reue hervor, daß ich meine Sünden beweine.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Dice el evangelista San Lucas que a Jesús, camino del Calvario, lo seguía una gran multitud del pueblo; y unas mujeres se dolían y se lamentaban por Él. Jesús, volviéndose a ellas les dijo: «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras y por vuestros hijos»; añadiéndoles, en figuras, que si la ira de Dios se ensañaba como veían con el Justo, ya podían pensar cómo lo haría con los culpables.

Mientras muchos espectadores se divierten y lanzan insultos contra Jesús, no faltan algunas mujeres que, desafiando las leyes que lo prohibían, tienen el valor de llorar y lamentar la suerte del divino Condenado. Jesús, sin duda, agradeció los buenos sentimientos de aquellas mujeres, y movido del amor a las mismas quiso orientar la nobleza de sus corazones hacia lo más necesario y urgente: la conversión suya y la de sus hijos. Jesús nos enseña a establecer la escala de los valores divinos en nuestra vida y nos da una lección sobre el santo temor de Dios.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

9. Station:
Jesus fällt zum drittenmal unter dem Kreuz.

9 Estación:
Jesús cae por tercera vez.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Mit der Größe und Zahl meiner Sünden wächst das Leiden des Herrn. Er sieht die Sünden aller Menschen zu allen Zeiten, an allen Orten und das vielfache "Umsonst" Seines Blutvergießens. Als der Herr kam, nahmen Ihn die Seinigen nicht auf und es fand sich kein Platz in der Herberge. Viele Herzen blieben verschlossen gegenüber Seiner Frohbotschaft. Gegen Jerusalem muß Er die Klage und Anklage erheben, du hast nicht gewollt. Wie gerne wäre der Herr hier liegen geblieben, um endlich einmal auszuruhen, aber Sein drängendes Herz ließ Ihm keine Ruhe.
Die wahre Liebe will nicht Halt machen mitten auf dem Wege. Jesus will mich nicht als verloren aufgeben. Er unternimmt den letzten Versuch.

- Herr, ich danke Dir, daß Du nicht irre geworden
bist an meiner bisherigen Untreue. Sei wegen Deines heiligen Blutes barmherzig zu allen Menschen, auch zu jenen, die die Finsternis mehr lieben als das Licht.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Una vez llegado al Calvario, en la cercanía inmediata del punto en que iba a ser crucificado, Jesús cayó por tercera vez, exhausto y sin arrestos ya para levantarse. Las condiciones en que venía y la continua subida lo habían dejado sin aliento. Había mantenido su decisión de secundar los planes de Dios, a los que servían los planes de los hombres, y así había alcanzado, aunque con un total agotamiento, los pies del altar en que había de ser inmolado.

Jesús agota sus facultades físicas y psíquicas en el cumplimiento de la voluntad del Padre, hasta llegar a la meta y desplomarse. Nos enseña que hemos de seguirle con la cruz a cuestas por más caídas que se produzcan y hasta entregarnos en las manos del Padre vacíos de nosotros mismos y dispuestos a beber el cáliz que también nosotros hemos de beber. Por otra parte, la escena nos invita a recapacitar sobre el peso y la gravedad de los pecados, que hundieron a Cristo.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

10. Station:
Jesus wird Seiner Kleider beraubt.

10 Estación:
Jesús es despojado de sus vestiduras.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Bei der Menschwerdung hat der Herr das Kleid der Herrlichkeit, das Ihm der Vater von Ewigkeit her gegeben, abgelegt und hat Knechtsgestalt angenommen. Jetzt gibt Er das Gewand noch her,
das Ihm die eigene Mutter gewoben. So gab Er alles, was Er vom Vater und von der Mutter hatte. Sein ganzes Erbteil, um uns damit auszustatten: das hochzeitliche Gewand der Gnade! Er hat alles gegeben, Er darf auch alles fordern: eine Liebe aus allen Kräften, aus ganzer Seele und aus ganzem, ungeteiltem Herzen. Der Herr mag keine geteilten Herzen.

- Herr, Deine Wunden bluten aufs neue!
Durch Deine Wunden werden wir geheilt. Hilf mir, Dich endlich so zu lieben, wie Du geliebt zu werden verdienst.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Ya en el Calvario y antes de crucificar a Jesús, le dieron a beber vino mezclado con mirra; era una piadosa costumbre de los judíos para amortiguar la sensibilidad del que iba a ser ajusticiado. Jesús lo probo, como gesto de cortesía, pero no quiso beberlo; prefería mantener la plena lucidez y conciencia en los momentos supremos de su sacrificio. Por otra parte, los soldados despojaron a Jesús, sin cuidado ni delicadeza alguna, de sus ropas, incluidas las que estaban pegadas en la carne viva, y, después de la crucifixión, se las repartieron.

Para Jesús fue sin duda muy doloroso ser así despojado de sus propios vestidos y ver a qué manos iban a parar. Y especialmente para su Madre, allí presente, hubo de ser en extremo triste verse privada de aquellas prendas, tal vez labradas por sus manos con maternal solicitud, y que ella habría guardado como recuerdo del Hijo querido.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

11. Station:
Jesus wird an das Kreuz genagelt.

11 Estación:
Jesús es crucificado.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Als der Herr Mensch wurde, hatte Jerusalem keinen Platz und keine Zeit und keine Liebe für Ihn. Zum Sterben hängt man Ihn an ein Kreuz zwischen Himmel und Erde. Er hatte nichts, worauf Er Sein Haupt hätte legen können. Seine segnenden Hände ruhen nun an den Nägeln, Seine Liebe aber kann nicht ausgelöscht und unmöglich gemacht werden. Er wird mit den Lippen bald nichts mehr sagen können, dafür sprechen Seine Wunden und Sein Blut! "Wenn ich am Kreuz erhöht bin, werde ich alles an mich ziehen". Nägel und Wunden sind Werk meiner Sünden.

- Herr, ich verberge mein Angesicht in die Hände und bereue tief meine Schuld! Mir kommt nun das Wort des Völkerapostels in den Sinn: "Alle jene, die schwer sündigen, kreuzigen für sich aufs neue den Sohn Gottes!"

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

«Y lo crucificaron», dicen escuetamente los evangelistas. Había llegado el momento terrible de la crucifixión, y Jesús fue fijado en la cruz con cuatro clavos de hierro que le taladraban las manos y los pies. Levantaron la cruz en alto y el cuerpo de Cristo quedó entre cielo y tierra, pendiente de los clavos y apoyado en un saliente que había a mitad del palo vertical. En la parte superior de este palo, encima de la cabeza de Jesús, pusieron el título o causa de la condenación: «Jesús el Nazareno, el Rey de los judíos». También crucificaron con él a dos ladrones, uno a su derecha y el otro a su izquierda.

El suplicio de la cruz, además de ser infame, propio de esclavos criminales o de insignes facinerosos, era extremadamente doloroso, como apenas podemos imaginar. El espectáculo mueve a compasión a cualquiera que lo contemple y sea capaz de nobles sentimientos. Pero siempre ha sido difícil entender la locura de la cruz, necedad para el mundo y salvación para el cristiano. La liturgia canta la paradoja: «¡Dulces clavos! ¡Dulce árbol donde la Vida empieza / con un peso tan dulce en su corteza!».

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

12. Station:
Jesus stirbt am Kreuz.

12 Estación:
Jesús muere en la cruz.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Wie merkwürdig! Der Herr nennt sich "das Leben" und will, "daß alle durch Ihn das Leben in Überfülle haben" - und stirbt! Das Samenkorn ist in die Erde gefallen und bringt viele Frucht: die Erlösung im Kostbaren Blute! Der am Holze siegte, sollte auch am Holze besiegt werden! Vom Baum im Paradies kam der Tod, vom Kreuzesbaum kommt das Leben. Der Ungehorsam des ersten
Adam ist gesühnt durch das Opfer des Gehorsams des zweiten Adam: Jesus Christus. Unser Tod ist durch Seinen Tod verklärt: Er ist eine Reliquie in Ihm.

- Herr, nun bist Du verblutet! Dein Kostbares Blut wird aber für mich "der Strom des lebendigen Wassers ins ewige Leben". Ich kann nur danken.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Desde la crucifixión hasta la muerte transcurrieron tres largas horas que fueron de mortal agonía para Jesús y de altísimas enseñanzas para nosotros. Desde el principio, muchos de los presentes, incluidas las autoridades religiosas, se desataron en ultrajes y escarnios contra el Crucificado. Poco después ocurrió el episodio del buen ladrón, a quien dijo Jesús: «Hoy estarás conmigo en el paraíso». San Juan nos refiere otro episodio emocionante por demás: Viendo Jesús a su Madre junto a la cruz y con ella a Juan, dice a su Madre: «Mujer, ahí tienes a tu hijo»; luego dice al discípulo: «Ahí tienes a tu madre»; y desde aquella hora el discípulo la acogió en su casa. Después de esto, nos dice el mismo evangelista, sabiendo Jesús que ya todo estaba cumplido, dijo: «Tengo sed». Tomó el vinagre que le acercaron, y añadió: «Todo está cumplido». E inclinando la cabeza entregó el espíritu.

A los motivos de meditación que nos ofrece la contemplación de Cristo agonizante en la cruz, lo que hizo y dijo, se añaden los que nos brinda la presencia de María, en la que tendrían un eco muy particular los sufrimientos y la muerte del hijo de sus entrañas.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

13. Station:
Jesus wird vom Kreuze abgenommen.

13 Estación:
Jesús es bajado de la cruz.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Der Karfreitag des Herrn ist zu Ende. Man nimmt den Leichnam vom Kreuze und legt ihn in die Arme Mariens. Maria verehrt die heiligen Wunden und das Kostbare Blut. Die Einsicht des Hauptmanns und die Reue des Volkes kommen zu spät. Jetzt sprechen die Elemente der Natur: die Felsen, die bebende Erde,
die verfinsterte Sonne und der Tempelvorhang. Was denke ich unter dem Kreuze meines Herrn? Ich bete Sein heiliges Blut an. Meine Karwoche dauert noch an, aber auch ich werde einmal vom Kreuz des
Lebens und des Berufes abgenommen. Es geht alles vorüber - nur die Ewigkeit nicht. Maria blieb ihrem Gelübde, Magd des Herrn zu sein, treu. Still und wortlos hat sie ausgehalten. solange der Vater wollte.

- Herr, lehre mich immer mehr, einzusehen, daß es nur auf den Willen des Vaters ankommt. Wenn ich mein "Ja" zu ihm spreche, dann darf ich von Liebe zu Dir sprechen, sonst nicht.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!

V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

Para que los cadáveres no quedaran en la cruz al día siguiente, que era un sábado muy solemne para los judíos, éstos rogaron a Pilato que les quebraran las piernas y los retiraran; los soldados sólo quebraron las piernas de los otros dos, y a Jesús, que ya había muerto, uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza. Después, José de Arimatea y Nicodemo, discípulos de Jesús, obtenido el permiso de Pilato y ayudados por sus criados o por otros discípulos del Maestro, se acercaron a la cruz, desclavaron cuidadosa y reverentemente los clavos de las manos y los pies y con todo miramiento lo descolgaron. Al pie de la cruz estaba la Madre, que recibió en sus brazos y puso en su regazo maternal el cuerpo sin vida de su Hijo.

Escena conmovedora, imagen de amor y de dolor, expresión de la piedad y ternura de una Madre que contempla, siente y llora las llegas de su Hijo martirizado. Una lanza había atravesado el costado de Cristo, y la espada que anunciara Simeón acabó de atravesar el alma de la María.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.

   

14. Station:
Jesus wird ins Grab gelegt.

14 Estación:
Jesús es llevado al sepulcro.

Wir beten Dich an, Herr Jesus Christus, und sagen Dir Dank.
Denn durch Dein heiliges Kreuz hast Du die ganze Welt erlöst.

Nun ist es ganz still geworden. Wenige Getreue tragen den Herrn zu Grab. Die Hoffnung selber steigt nun nieder in die Hoffnungslosigkeit des Grabes. Nun gibt es keine Hoffnungslosigkeit mehr auf Erden.
Über diesem Zug liegt ein stiller Friede: der Friede siegreicher Vollendung. Bald kommt die Zeit der Herrlichkeit, denn das Grab ist nicht die letzte Stätte und der Tod nicht das letzte Wort, sondern die Auferstehung und das Leben. "Wenn wir mit Christus leiden und in den Tod gehen, werden wir auch mit ihm auferstehen und verherrlicht werden."

- Herr, das Felsengrab, in welchem Du ruhst, ist nun der Tabernakel; dort darf ich Deinen heiligsten Leib und Dein Kostbares Blut anbeten, ja, ich darf durch den Besitz Deiner Erlösungsgnaden selber ein lebendiger Tempel sein. Noch ist der Weg zum ewigen Leben eng und die Pforte schmal, aber Dein Kostbares Blut wird mich retten. Gehe Du mit mir den Kreuzweg meines Lebens, dann finde ich heim zum Vater.

Vater unser....
Gegrüßt....
Ehre sei....

Gekreuzigter Herr Jesus Christus!
Erbarme Dich unser!


V. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R. Pues por tu santa cruz redimiste al mundo.

José de Arimatea y Nicodemo tomaron luego el cuerpo de Jesús de los brazos de María y lo envolvieron en una sábana limpia que José había comprado. Cerca de allí tenía José un sepulcro nuevo que había cavado para sí mismo, y en él enterraron a Jesús. Mientras los varones procedían a la sepultura de Cristo, las santas mujeres que solían acompañarlo, y sin duda su Madre, estaban sentadas frente al sepulcro y observaban dónde y cómo quedaba colocado el cuerpo. Después, hicieron rodar una gran piedra hasta la entrada del sepulcro, y regresaron todos a Jerusalén.

Con la sepultura de Jesús el corazón de su Madre quedaba sumido en tinieblas de tristeza y soledad. Pero en medio de esas tinieblas brillaba la esperanza cierta de que su Hijo resucitaría, como Él mismo había dicho. En todas las situaciones humanas que se asemejen al paso que ahora contemplamos, la fe en la resurrección es el consuelo más firme y profundo que podemos tener. Cristo ha convertido en lugar de mera transición la muerte y el sepulcro, y cuanto simbolizan.

Padre Nuestro....
Ave Maria....
Gloria al Padre....

Jesús, pequé: Ten piedad y misericordia de mí.

Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su santísima Madre, triste y afligida al pie de la cruz. Amén, Jesús.




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